Marlos Moreno es la peor de las mentiritas que se ha inventado Nacional. Este equipo usó toda su estrategia publicitaria para venderlo y lo hizo hace un año: cinco millones de euros pagó el Manchester City por su pase.
Quisieron valorarlo, sopesar si era útil tenerlo en el equipo de Guardiola. Sin embargo, el español apenas vio su físico menudo, frágil, se dio cuenta de que era otra copia barata de Robinho, el clásico sobradorcito que es triatlonista: hace la bicicleta, corre y nada.
Lo prestaron a la Coruña quien hace rato dejó la gloria que le dio Bebeto y Mauro Silva y que ahora compite para no caer en el infierno de la segunda división. Su técnico Gaizka Garitano se quejó del estado físico deplorable que tenía el delantero, hecho que se comprobó en su primer partido en La Liga cuando entró faltando 22 minutos con la esperanza de ser el hombre que salvara a su equipo de la derrota contra el Atletico de Bilbao.
A la primera que tuvo cometió esta falla imperdonable:
Ahora llega al Girona, un equipo recién ascendido a la primera división de España. Arriba en una camada de jugadores que fueron comprados por el Manchester City y que el club inglés no piensa tomar jamás. Ay Marloncito, ¿qué dirán de ti todos esos desarrapados del sur que te comparaban con Asprilla?