Ningún locutor colombiano despierta la pasión por el ciclismo como Mario Sabato. Su amistad con Carlos Vives y la inclusión de su narración en el Orgullo de mi tierra, canción con la que el samario le rinde homenaje a los ciclistas colombianos, confirma que Sabato ya es un icono nacional.
Además, en sus continuas visitas al país, donde ha narrado completa la vuelta a Colombia, estableció aún más el contacto con los ciclistas nacionales. Tal es el caso de Rigoberto Urán, que como lo atestiguan estas fotos y la maravillosa narración de su triunfo en el Tour, es uno de los más cercanos amigos con los que cuenta Urán.