Un posible acuerdo de paz llena de esperanza a millones de colombianos, que su unico interes es convivir en una Colombia con futuro para ellos y sus hijos, pero tambien motiva y exalta los animos guerreristas de los que ven en la prolongacion del conflicto el alimento natural para sus intereses, politicos, sociales y economicos.
Los acuerdos que se pacten para lograr la firma de la paz con las FARC-EP, no van a solucionar los problemas estructurales del pais, sólo van a ser las condiciones acordadas para que un grupo armado se pueda desmovilizar e incorporar a la vida politica nacional. Pero si es el surgimiento de un nuevo escenario como es el posconflcito, que estara lleno de dificultades, propias de una etapa que buscará refundar una nación bajo principios de justicia social, equidad, inclusión, perdón y reconciliación.
Un acuerdo de paz con las FAR-EP , cambia radicalmente el contexto de Colombia, dada la importancia histórica, ideológica, política y militar de esta agrupación. Es comprensible el dolor de las victimas del conflicto y su anhelo de justicia, pero no es justificable escuchar y seguir voces de politicos como el expresidente Álvaro Uribe Vélez que pretende crear todo un imaginario del terror para deslegitimar, confrontar y acabar con una ilusion de millones de compatriotas, que ven en un acuerdo de paz el comienzo para dar fin a la “ oscura noche que desangra la vida y la esperanza de millones de Colombianos”
Se aproxima la contienda electoral para la elección presidencial del próximo año, en un país presidencialista como el nuestro, quien llegue a esa investidura marca un rumbo para la nación. Con todas sus falencias el presidente Santos ha demostrado apertura democrática, espacios de diálogo, y se ha jugado políticamente por la paz. Es vital continuar con un Presidente que este en esta línea de la resolución del conflicto. Y seria traumático y regresivo que llegue a la presidencia una propuesta como la del Uribe Centro Democrático, o cualquier otra que vaya en contravía de un deseo nacional de consolidar la paz.
