La venta de UNE a MILLICOM. Un triunfo de las “fuerzas vivas”
Por: Francisco Luis Valderrama A.
Octubre 1 de 2013
Están de plácemes las “fuerzas vivas” de Antioquia con la fusión UNE TIGO. No será todavía lo que buscan pero es el primer paso de un sueño largamente acariciado. De su propia entraña surgen los actores que han concretado una estrategia ya intentada con la Fábrica de Licores. Por ahora le han dado al premio seco. No es difícil adivinar cuál será la próxima jugada.
El eufemismo de la fusión sólo busca enmascarar lo que realmente va a ocurrir. Por 150 millones de dólares han vendido el 50% de UNE a MILLICOM, inversionista de dudosa reputación, escogido a dedo, sin siquiera un proceso de subasta pública para intentar maximizar el beneficio colectivo. Así de simple.
Las comillas pretender señalar tanto a la plutocracia criolla detrás de la decisión como a los grupos políticos que le son funcionales. Grupos “avispados”, “vivos” según la expresión popular, que actúan con la comodidad de no tener que responder por sus acciones. Al fin y al cabo controlan las instituciones que tendrían la responsabilidad de vigilarlos. Lo ocurrido con ORBITEL o lo no ocurrido, para ser más preciso, es una prueba fehaciente de ello.
Hacen parte de esas “fuerzas vivas” ciertos grupos de poder que cierran los ojos cuando personajes salidos de sus entrañas convierten a UNE en una pasarela o en un bar, como ocurrió con el sibarita inepto y el atarvan borracho que la condujeron desde su escisión de EPM. Tan funesta fue la alcaldía bajo cuya egida se dio el episodio de la vajilla, como la administración que adquirió un negocio sin futuro como ORBITEL y le entregó a esa cultura de canutillos el manejo de UNE. Más grave será aún será el embeleco de convertir a EPM en una empresa multi latina muy importante, cualquier cosa que eso signifique. Consecuencia indeseable de una abultada caja, producto de tarifas innecesariamente altas que impiden a muchos usuarios el acceso pleno a los servicios públicos de la empresa de la cual son dueños y facilitan aventuras financieras a administradores con alma de banqueros y a políticos en campañas de medio plazo.
Hay “fuerzas vivas” que consideran mala e inconveniente la venta de ISAGEN pero no tienen objeción alguna con el regalo de UNE a MILLICOM. No faltan los lameculos capaces de encontrar diferencias entre los dos procesos. Si bien ambos son nocivos y generan un grave detrimento patrimonial al estado, hay que anotar que al menos en el caso de ISAGEN se va a proceder a un proceso de subasta pública y no, como en el caso de UNE, a una selección a dedo.
Si nos atenemos a lo explicado durante el debate por la fusión con TIGO, UNE fue irresponsable al incursionar sola en el negocio de movilidad 4G LTE en el 2010. Justamente fue ese el argumento central utilizado para justificar la fusión. Sabemos que este negocio estuvo precedido de serios estudios que lo aconsejaban, pero si efectivamente fue irresponsable, los señores directivos de EPM y UNE han debido denunciar el hecho ante los organismos competentes. Y si tal afirmación no corresponde a la realidad, entonces el proyecto de fusión está viciado de nulidad y soportado en premisas falsas que tendrían que haber obligado a la intervención de las entidades de control.
Pero no fue así. Desafortunadamente la ley facilita a esos organismos el resquicio legal para pretermitir sus obligaciones por cuanto, según aducen, su misión no puede ser ejercida en forma previa sino posterior. Como quien dice: Esperemos que se esfume el patrimonio público para intervenir a favor de preservarlo. Ni más ni menos que otro “ORBITELAZO”. ¿Por qué razón se inhiben de intervenir? Simplemente porque son controlados por los mismos grupos políticos que deben vigilar. Organismos solícitos cuando se trata de infracciones cometidas por funcionarios subalternos, que por supuesto deben ser castigadas, pero inútiles para controlar los asuntos gruesos. Todo el peso de la ley para lo pequeño y rodilla en tierra en los asuntos de mayor calado. Esa es la caracterización exacta de estas inútiles “fuerzas vivas”, con conciencia selectiva de sus responsabilidades. Con razón alguien afirmaba que en Colombia lo único que se castiga es ser negro, indígena, pobre, robar poquito y beber en tienda.
También tienen asiento en el Concejo de Medellín algunas “fuerzas vivas”. En teoría, el acuerdo 17 se limita a autorizar la transformación de la naturaleza jurídica y la modificación de la composición accionaria de UNE EPM telecomunicaciones así como la cesión a terceros de la administración, gestión u operación del negocio. Pero haciendo a un lado los tecnicismos, lo que en realidad autorizó el Concejo (11 concejales exactamente) fue la entrega del 50% de UNE a MILLICOM a cambio de una prima de control. Incluso la propuesta inicial de EPM UNE era tan descarada que ni siquiera contemplaba la prima de control, la cual fue introducida por el Concejo como una especie de lavatorio de conciencia ante lo que estaba autorizando. De manera que la escogencia a dedo del supuesto socio fue avalada por el Concejo de Medellín, así la sinuosa redacción del texto pretenda escurrir el bulto a las consecuencias que con toda seguridad se desprenderán de lo aprobado. Seguramente hubo concejales de buena fe que dieron su voto afirmativo a la fusión como también los hubo que ni se dieron cuenta de lo que hacían. Lugar especial merece uno de ellos, digno representante de las “fuerzas vivas”, cuyas convicciones tienen la firmeza y solidez de una cabuya en el bolsillo.
La fusión UNE TIGO cae de perlas para eludir responsabilidades por la debacle ORBITEL, propiciada, impulsada y bendecida por las mismas “fuerzas vivas”. Si no fue posible con UNE como empresa pública, mucho menos lo será con la figura empresarial adoptada. La adquisición de la parte privada de ORBITEL se hizo con un plan de negocios (WIMAX) que soportaba la suma a pagar. Las cifras esperadas nunca se lograron, WIMAX fue un fracaso total y ya ha sido dado de baja. La consecuencia de semejante embuchado fue haber lesionado en materia grave el patrimonio de EPM al tiempo de haber favorecido los intereses privados de los grupos vendedores de ORBITEL.
Finalmente, no olvidemos que UNE es solo el premio seco y que más temprano que tarde querrán hacer lo mismo con EPM: Así como la fusión UNE TIGO fue la jugada final de una estrategia trazada hace mucho tiempo por las mismas “fuerzas vivas” que hoy alaban la internacionalización de EPM, mañana utilizaran las consecuencias del sueño faraónico de ser grandes, para justificar su entrega, bajo los mismos pretextos con los cuales hoy regalan a UNE.
Con lo fácil que era rescatar a UNE. Bastaba con poner al frente una persona capaz y competente, con conciencia y respeto por la empresa que tenía entre manos.