Le escribo por este medio para manifestarle mi inconformidad con una columna de opinión que apareció publicada en el portal que usted dirige, “La estafa de los fondos privados de pensión” firmado por la señora María del Rosario Vázquez Piñeros, Profesora de la Facultad de Filosofía y Ciencias Humanas Universidad de La Sabana. Este artículo se publicó el día de hoy y tiene varias faltas a la verdad e imprecisiones que desinforman al público general y generan confusión sobre el régimen pensional privado. A continuación, enumero las imprecisiones de la columna con sus respectivas respuestas:
1. El primer ejemplo que menciona la columna, de una persona que se gana 5 millones de pesos, no caracteriza en absoluto a la población colombiana. Según cifras de la GEIH del DANE, menos del 5% de la población del país cuenta este tipo de salarios. Evidentemente, y como lo hemos planteado nosotros desde Asofondos, a las personas con salarios más altos les conviene más estar en Colpensiones, SIEMPRE Y CUANDO tengan la posibilidad real de alcanzar las 1.300 semanas requeridas en ese régimen; pero esto solo ocurre con el 10% de los afiliados de Colpensiones. Lo grave de la situación es que a dichas personas les conviene estar ahí porque el Estado a través del Presupuesto General de la Nación (que financiamos todos, incluyendo los más pobres, a partir de impuestos, subsidia un gran monto de su pensión. Consideramos que esto es injusto e inequitativo bajo cualquier concepción de justicia. Los cálculos del Ministerio del Trabajo muestran, de hecho, que una persona que cotizó durante los últimos diez años por 25 SMMLV recibe un subsidio de unos 1.000 millones de pesos, mientras que un colombiano que cotizó durante el mismo período por 1 SMMLV recibe un subsidio de unos 90 millones de pesos, cerca de $900 millones menos DE SUBSIDIO que los más ricos. ¿Es esto justo?
2. Es falsa la afirmación que señala que en los Fondos Privados no se subsidian ciertas pensiones. Si una persona no cumple con el capital suficiente para la financiación de su pensión, pero si alcanza 1.150 semanas cotizadas y la edad mínima requerida para pensionarse, en el Régimen Privado – fondos de pensiones-, se le garantiza la obtención de una pensión de salario mínimo. Por otra parte, si se comparan estos requisitos a los exigidos por Colpensiones, vemos que a muchos colombianos les resulta más conveniente el fondo de pensiones pues se necesitan 1.150 semanas cotizadas, o lo que en tiempo equivale a casi tres años menos que en Colpensiones, donde se requieren 1.300.
3. Por otra parte, algo que no se plantea en la columna, es que solamente cerca del 20% de los colombianos (10% en Colpensiones, 25% en ahorro individual) en edad de pensión efectivamente logran cumplir los requisitos mínimos exigidos para pensionarse. Esto se debe, entre otros factores, a la gran informalidad laboral del país. Ahora bien, quienes no completan los requisitos para pensionarse reciben, en los fondos privados, una devolución de saldos, mientras que en el régimen público (Colpensiones) reciben una indemnización sustitutiva. En el primer caso, la devolución de saldos de los fondos privados se calcula como la suma de los aportes más los rendimientos financieros obtenidos a lo largo del tiempo con una rentabilidad histórica de 14%. En contraste, la indemnización sustitutiva de Colpensiones equivale a la suma de los aportes ajustada solamente por inflación. Esto quiere decir que, a la población que no consigue pensionarse, y que es la más vulnerable, le conviene más estar en un fondo privado porque se le devuelve una cantidad mayor de dinero que en el régimen público, suma que puede ser entre 3 y 4 veces más alta.
4. Las pensiones que otorgan los Fondos Privados son de carácter vitalicio, a diferencia de lo que plantea la columna. Además, en caso que no se agote el capital que alcanzó a ahorrar durante la etapa de desacumulación, en muchos casos este puede ser heredable, lo cual no ocurre en Colpensiones.
5. Debido a los anteriores argumentos, la columna plantea de forma equivocada a quiénes les conviene más cada régimen. El Régimen Público de Colpensiones es el más conveniente para personas de ingresos más altos, pues les subsidia inmensamente el monto de las pensiones (si tienen además chance de lograr las 1300 semanas). El Régimen de Ahorro Individual les conviene a los más pobres y a la clase media del país, pues se les exige menos tiempo para pensionarse y, en caso que no logren cumplir con todos los requisitos de pensión, se les devuelve más dinero que en Colpensiones. Este argumento está respaldado por varios estudios del Ministerio de Hacienda, el Departamento Nacional de Planeación, el BID, la OCDE, la CEPAL, entre otros.
6. Otra de las imprecisiones corresponde a las ganancias de los Fondos Privados. En el Régimen de Ahorro Individual las administradoras cobran una comisión fija (que es menor para todas las administradoras a la cobrada por Colpensiones) en el momento de cada aporte. Así, los rendimientos que se obtienen por las inversiones son exclusivamente propiedad de los afiliados, sirven para incrementar el monto de los ahorros de cada quien y, por tanto, contribuyen a aumentar el monto de la pensión o de la devolución de saldos de nuestros afiliados, en caso de que no logren pensionarse.
7. Por otra parte, la autora no tiene en cuenta que los subsidios del régimen público, y de los regímenes especiales de pensiones, le costarán al país unos 38 billones de pesos en 2017. Este es el rubro más costoso del Presupuesto General de la Nación. Es injusto, sin embargo, que este déficit pensional lo financiemos todos los colombianos y solo unos pocos, especialmente los más ricos, sean los principales beneficiados.
8. Además, desde los fondos privados nunca se ha planteado que se privatice Colpensiones. Lo que se ha planteado es que no existan subsidios regresivos destinados a los de más altos ingresos, es decir que sea un sistema más equitativo.
9. Los fondos privados de pensiones han tenido un manejo transparente de los ahorros de sus afiliados. Sorprende que nos asocie a escándalos de corrupción, cuando en Colpensiones ha habido, por ejemplo, más de noventa casos asociados a desfalcos y homicidios desde el 2013, como lo han reportado los medios.
Es necesario, que tanto medios como academia se unan al esfuerzo de construir un mejor sistema de pensiones que beneficie a todos los colombianos y coincidimos en que el principal esfuerzo del gobierno debe ser abogar por un sistema más justo e incluyente. No obstante, consideramos que esta discusión debe estar planteada bajo argumentos sustentados en evidencia, datos e información objetiva. Es por eso que solicitamos una rectificación de contenidos y en particular de la acusación del delito penal que hace la autora en su columna al señalar que existe una estafa en los fondos de pensiones.
Miles de gracias por su atención.
Cordial Saludo,
Santiago Montenegro Presidente de Asofondos