El caso comenzó en el año 2012, cuando Trump compró un club de golf que estaba a punto de quebrarse a la cadena hotelera Marriot. En ese momento pagó 5 millones de dólares, una suma muy pequeña, pero como parte del trato tenía que pagar 50 millones que el club les debía a los socios que habían pagado una acción reembolsable y querían darla por terminada.
Por carta y en una reunión, la compañía de Trump les informó a los socios del club que los que quisieran acabar con su membresía deberían continuar pagando una cuota anual sin derecho a usar las instalaciones. Además, no se les devolvería su dinero hasta que nuevos socios los reemplazaran en el club, un proceso que podría ser muy largo.
Los socios, muy molestos, reclamaron que Trump estaba cambiando las reglas de los contratos de su acción y presentaron una demanda de acción colectiva en contra del ahora presidente de Estados Unidos. El abogado de los socios, Brad Edwards, dice que Trump esencialmente, revocó las membresías quedándose con los pagos. Y dijo que “lo más importante de pertenecer a un club es el acceso a las instalaciones y al quitarles el acceso les quito la membresía mientras ellos seguían pagando”.
El 1 de febrero de este año, el juez Kenneth Marra estuvo de acuerdo con el abogado y obligó al club a devolverles a 65 socios el pago de sus acciones más intereses, para un total de 6 millones de dólares. Aunque Donald Trump no estuvo presente en el juzgado, declaró a través de un video y su hijo Eric testificó en el caso.
En su decisión el Juez no se refiere a Trump como presidente Trump. En una explicación al margen, explica que como al momento de presentar esta demanda, Donald Trump no era presidente, la corte se referiría a él por su nombre y que al hacerlo no pretendía faltarle al respeto ni a él ni a su posición.
En un comunicado, el imperio financiero de Trump dijo no estar de acuerdo con la decisión tomada por el juez ya que, al momento de comprar el club, este estaba al borde de la quiebra y era poco probable que los socios recuperaran su dinero. Por esto, la compañía va a apelar la decisión.