James Rodríguez ha tenido muchísimas versiones mejores que la actual. El colombiano ha brillado en Porto, Mónaco, Real Madrid y la Selección Colombia. El presente que está viviendo el cucuteño no es para que reciba trato que le está dando el técnico francés.
Nadie dijo que ganarse la titularidad en el mejor club de Europa iba a ser fácil, pero James lo ha intentado entrenamiento tras entrenamiento, partido a partido. Desde su llegada a Madrid, mucho se ha especulado de su vida fuera de las canchas y esto le ha complicado la vida.
Ha lidiado por mantenerse en la casa blanca, luchó con Ancelotti, también batalló por ser tenido en cuenta por Rafa Benítez y ahora parece perder la contienda contra Zinedine Zidane, quien ha demostrado que hoy no es ni el quinto cambio en la nómina madridista.
Rodríguez ha sido catalogado como el Chico Maravilla, no en balde fue el goleador de la copa del mundo Brasil 2014, rótulo que muchos futbolistas matan por tener. En un solo mundial, consiguió más goles que Cristiano Ronaldo o Lío Messi, por nombrar algunos.
Entonces hoy parece una broma, que el estratega francés decida poner jugadores como Lucas Vásquez o Isco Alarcón por encima del colombiano, es más, en el anterior Barça vs Real, prefirió a Casemiro y a Mariano, un dominicano desconocido.
Mensaje contundente para James: váyase del Real, busque otro equipo que explote sus capacidades. Sí hay vida después del conjunto merengue, o si no, pregúntele a Özil, Di María y hasta al mismo Robben.
