Y ahora viene el comandante Jesús Santrich a preguntarle vía trino al fiscal Martínez Neira, “¿cuál es el plazo para que cuentes sobre empresas que financiaron el paramilitarismo y tus vínculos con ellas?
El fiscal indaga por los dineros de las Farc y la respuesta de Santrich no puede ser otra diferente a la usada, un dardo venenoso y nada inocuo que solo busca no decir nada de aquellos dineros calculados por The Economist en la pendejada de 33 billones de pesos.
Es el mundo al revés en un país que ya en dos días celebra una gran votación en donde para la gran mayoría parece ser que entramos en un mundo de paz y prosperidad, para otros es el fiel reflejo de la caída en manos del caos castrochavista, cuando para una ínfima minoría dentro de los cuales me encuentro, no será ni lo uno ni lo otro, una espuma más que rellena la copa de la patria boba en la que vivimos y que se caracteriza, obvio, en la pobreza y la corrupción.
Por lo anterior, y sólo con la franca esperanza de estar tremendamente equivocado, creo que es el momento de dejar de lado el negativismo, respirar profundo, y meternos un rato en el mundo de la ficción y para ello ofrezco tres pequeños relatos de mi autoría, que yo llamo gotitas, y para no darle más largas al tema, pues vamos con ellas:
“Las buenas gentes
Bajé las escaleras e iba por la calle, como siempre tarareando una de Sabina, alguna de amores irreales y mirando nubes copular y no vi la piedra y tropecé, casi me como el pavimento pero a dios gracias que me di con toda la cara en las rodillas de una dama que como buena samaritana abrió sus piernas e impidió que se rompiera mi coco.
En la salita de su casa curó mis heridas, en la cocina me dio una sopita de alcachofas y ya cuando estábamos en su habitación me acordé que yo bajé a la calle a comprar cigarrillos.”
“Siete punto siete grados
Tembló cuando estaban haciendo el amor y nunca supieron si fue un orgasmo enloquecedor o el simple resultado de caerse el mundo.”
“Amores quebradizos
Tanto se querían y tanto impulso tuvieron que, con el primer piquito, a él se le rompió el diente.”
Y hablando de…
Y hablando de amores quebradizos, solo me pregunto qué tan férrea es la posición del vicepresidente Vargas Lleras con todo esto de la paz…
