Desde los 17 años, mi vida ha transcurrido entre la música llanera, el coleo --deporte insignia del llano-- y la radio. Así soy yo, Carlos Arturo Rico Huérfano, vichadense de alma, vida y corazón, criado con pescado, mañoco y mucho mango.
Son muchos los esfuerzos para que los colombianos conozcan el departamento de Vichada, al oriente de Colombia, sobre todo de quienes nos dedicamos a esta labor de mantener informada la región, durante los últimos 30 años, a punta de sufrimientos, improperios y, como la mayor parte de cosas en nuestro país, todo nos ha tocado con las uñas.
Si usted ve en el mapa de Colombia, el Vichada es el segundo Departamento más grande de Colombia, pero, de igual manera, el más incomunicado del territorio nacional. Ahora imagínense, ustedes amigos, las dificultades que hay para informar los acontecimientos de la región: la radio se quedaba corta para llegar a todo los lugares lejanos del departamento.
Mientras la tecnología hace presencia en el interior del país, aquí en el Vichada apenas estamos dando los pinitos para tener un periódico el cual nos permita contarnos todo desde la región. Así nace el periódico El Morichal, con la ayuda de un hijo de estas tierras, Edwin Suarez que salió a Bogotá a estudiar Comunicación Social y periodismo, y gracias a su interés por comunicar los acontecimientos, logramos unir esfuerzos para trabajar en pro de mantener informado al departamento.
El Morichal es una palma nativa de esta región, y por donde camine hay un moriche. El periódico es una excusa para contar lo bueno y lo malo del Vichada; es otra forma que encontré para distraerme y para que Colombia y el mundo entero conozcan mi pensamiento. Es más, es un espacio para que nos contemos nosotros mismos y reconocernos orgullosamente como habitantes vichadenses.