Ituango, la tierra de Jesús María Valle, el defensor de los derechos humanos asesinado en Medellín en 1998, por los paramilitares y las mafias del narcotráfico aliadas con generales y militares criminales, aporta su territorio histórico a la construcción de la paz con justicia y derechos sociales.
Ituango, en el departamento de Antioquia será una zona de ubicación de los integrantes de las Farc en su proceso de movilización política con la terminación del conflicto social y armado.
La vereda de Santa Lucía, es el punto exacto de esta nueva realidad social y política que llega con la paz.
Ituango es un municipio de Colombia, situado en la subregión Norte del departamento de Antioquia, que está conformada por los siguientes municipios: Angostura, Belmira, Briceño, Campamento, Carolina del Príncipe, Donmatías, Entrerríos, Gómez Plata, Guadalupe, Ituango, San Andrés de Cuerquia, San José de la Montaña, San Pedro de los Milagros, Santa Rosa de Osos, Toledo, Valdivia y Yarumal. Allí habitan casi 300 mil colombianos.
Límites
Limita por el norte con el municipio de Tarazá y el departamento de Córdoba, por el este con los municipios de Valdivia y Briceño, por el sur con Briceño, Toledo y Peque y por el oeste con los municipios de Dabeiba y Mutatá.
Historia
El municipio de Ituango tiene su origen en los grupos prehispánicos que habitaban la vertiente del río Cauca, al norte de Santa Fe de Antioquia, eran grupos culturalmente afines que conformaban pequeños cacicazgos en formación, estos grupos eran los Curumes, Hebejícos, Noriscos, Peques e Ituangos; cacicazgos que poseían jefaturas hereditarias permanentes, asumidas por dos hermanos (uno de los cuales ejercía el poder en la unidad principal, mientras el otro controlaba a los grupos dominados y se desempeñaba como jefe de los ejércitos del cacicazgo), se podían configurar así una forma de gobierno eficaz, para defender el territorio y mantener el control sobre los grupos situados en regiones diferentes, pero pertenecientes a la misma unidad socio – política. A pesar de que tenían unidades políticas autónomas, diferenciadas notablemente y conflictos entre ellos, realizaban alianzas o confederaciones para enfrentar a los grupos foráneos; en el caso de la conquista española se elegía jefe único, al individuo de mayor prestigio y valentía. Lo importante de esta situación era que no comprometía la autonomía de cada grupo .
La historia de Ituango comienza con los primeros conquistadores españoles que llegaron al lugar, primero Francisco César en 1537, y luego Juan de Badillo en 1538. Ambos partieron de su sede en San Sebastián de Urabá (cerca del hoy municipio de Necoclí); cada uno remontó el río Sinú hasta su nacimiento, y ambos, cada uno en su momento, penetraron luego en la comarca de Ituango.
Los indígenas habitantes de la región de Ituango, de las etnias catía y nutabe, fueron sometidos mediante una feroz violencia de los conquistadores españoles y los curas doctrineros.
Poco después llegarían a Ituango don Gaspar de Rodas y don Andrés de Valdivia, quienes protagonizaron la historia más sangrienta en su labor de despojo de los indígenas.
En 1568, la autoridad española ordena a don Gaspar de Rodas fundar una nueva ciudad en donde lo creyera conveniente a fin de sujetar y reducir las tribus de esa zona de Antioquia que se resistían a la conquista.
Casi simultáneamente, en 1569, don Andrés de Valdivia es nombrado por el rey de España gobernador y capitán general de las provincias de Antioquia, Ituango, Nive y Brenduco.
Cumpliendo sus órdenes, don Gaspar de Rodas, ubicado en Santa Fe de Antioquia, publicó una invitación para la fundación de "San Juan de Rodas", a la que acudieron aventureros de todas las colonias vecinas y también hombres de bien.
Don Gaspar de Rodas reunió unos 80 hombres de armas y 500 indios. Visitó primero el Valle de Norisco (cerca del hoy municipio de Frontino); los indios de esta comarca, para desembarazarse de los incómodos visitantes, dijeron a la expedición fundadora que las riquezas se hallaban más lejos, en tierras de Ituango. Don Gaspar de Rodas no encontró sino trabajos en esta ruta, aunque logró someter muchas tribus y descubrir grandes poblaciones en las orillas del río Zenú (hoy Sinú), y debido a muchas batallas con los nativos, y aunque lo intentó, no logró estabilizar la fundación de "San Juan de Rodas", poblado que iría a llamarse de este modo en memoria de su propio apellido. Don Gaspar empezó a construir el poblado que perpetuara su nombre en dos ocasiones, pero los catíos arrasaron con los incipientes poblados en ambas oportunidades.
Al final, del nombre de "San Juan de Rodas" no quedó sino eso: el nombre, y la ilusión del rapaz conquistador de haber fundado el pueblo.
Mientras tanto había llegado desde España don Andrés de Valdivia por Cartagena, con altos cargos reales incluido el de gobernador. Se declaró gobernador de la provincia de los dos ríos y él sí tuvo éxito en la fundación de la nueva ciudad encomendada, (donde hoy queda el Valle de Toledo). Allí fundó a Úbeda en honor al pueblo donde había nacido en España). Para mantenerla funcionando le llegaron refuerzos desde Santa Fe de Antioquia, asiento de una naciente y poderosa elite.
Pero en esta empresa los españoles atropellaron duramente a los indígenas, quienes se concentraron y planearon en represalia una mortal emboscada a los ibéricos en lo que hoy conocemos como la matanza (cerca del Valle de Toledo). Allí, el 15 de octubre de 1574, perecieron el gobernador Valdivia y sus acompañantes de manos del cacique Guarcama y sus guerreros nutabes. Valdivia fue asesinado de un golpe con una pesada maza que le destrozó el cráneo, junto a la india que le servía de intérprete. Los pocos de su tropa que lograron huir regresaron a Santa Fe de Antioquia y se pusieron bajo la protección de don Gaspar de Rodas.
Don Gaspar de Rodas regresó al Valle de Guarcama donde, fingiendo amistad a los nativos, los castigó luego severamente, entre ellos al Cacique Guarcama a quien hizo matar.
Don Gaspar de Rodas realizaría posteriormente otras fundaciones, pero siempre con la nostalgia de no haber podido fundar a "San Juan de Rodas". Dicen que en su vejez contaba sus aventuras y penurias por las tierras de Ituango, y que hablaba sobre montañas que consideraba las más escabrosas conocidas por él, y sobre los indígenas tuangos, los más valientes guerreros que hubo durante la conquista española.
En 1844, fecha oficial de la fundación de manos del gobernador de Antioquia José María Martínez Pardo, la localidad aparece con el nombre de Aguada siendo caserío, corregimiento y viceparroquia del distrito de Sabanalarga.
En 1847 Ituango fue constituido como distrito parroquial y erigido como municipio con el actual nombre, proveniente de vocablos indígenas cuyo significado en español es "Río de Chicha".
Antes de la Invasión española, muchas culturas florecían en este territorio. En el primer siglo de conquista, más del noventa por ciento de dicha población había sido muerta en combates. Durante tres siglos de dominio, algunas fueron exterminadas, otras sometidas, otras sobrevivieron en el refugio de las selvas y lugares más apartados. Fueron los primeros desplazamientos forzados de que se tiene noticia en nuestra tierra americana.
Las culturas africanas, variadas también, entraron en su historia con el estigma de la esclavitud, pero después de la independencia de Colombia obtuvieron su libertad. Muchos indígenas y negros se mezclaron con los conquistadores entre sí. De este mestizaje son hijos buena parte de los colombianos.
Ituango es tierra de personajes reconocidos, como el Doctor Jesús María Valle Jaramillo, apóstol de los derechos humanos, quien hizo de su ejercicio profesional una expresión comprometida y consecuente con su proyecto de vida; el paraíso escondido como suele llamarse al municipio de Ituango, también es cuna de artistas, ejemplo de ello es el maestro Ramón Vázquez, quien a sus noventa años, es el artista que más obras ha pintado en Colombia.
Las mujeres no se quedan atrás; Delcy Janeth Estrada, es una soprano quien además interpreta música andina colombiana, lo que le ha valido importantes reconocimientos como los primeros puestos en Antioquia le canta a Colombia, el festival nacional de bambuco y el gran premio Mono Núñez en Ginebra Valle, entre otros reconocimientos.
Ubicación geográfica de Ituango.
Está asentado en medio de la cordillera y atravesado por el río Cauca, y es un municipio verde, uno de los más montañosos de Antioquia y de grandes áreas de reserva natural. Tiene una gran actividad comercial y por la presencia de indígenas Catíos y las características de su poblamiento, es común encontrar en él una rica diversidad cultural. Sus zonas naturales son abundantes en fauna y flora como las orquídeas.
Economía local
Agricultura: Café, Maíz, Caña de Azúcar, Fríjol.
Ganadería: Vacuna de Ceba y Leche, Ovinos y Porcinos.
Minería: Oro y Platino.
Industria Maderera.
Ecoturismo
La Hidroeléctrica Pescadero-Ituango, una vez terminada, será parte fundamental de la economía con la producción de energía no solo para el abastecimiento de Colombia. Su construcción ha omitido los reclamos de la comunidad y de los movimientos ambientalistas.
Destinos ecológicos estratégicos de Ituango
Parque nacional Paramillo.
Cañón del río Cauca
Resguardo indígena Jaidukama
Loma de Pascuita
Cerro de Umaga
Hoyas selváticas de los ríos San Jorge, Sinú, Tarazá, Sansereno y San Matías, donde abunda la flor nacional de Colombia, la orquídea.
Su población se aproxima a los 25 mil habitantes.
Su superficie es de 2347 kilómetros cuadrados.
El Municipio se encuentra dividido actualmente en tres corregimientos y 101 veredas distribuidas así: corregimiento de La Granja; con 38 veredas, corregimiento de Santa Rita; con 25 veredas, corregimiento de El Aro; con 10 veredas y la cabecera municipal con 28 veredas. Dentro de esta división se halla inserto el P. N. N. Paramillo, que abarca más de la mitad del municipio (1.818,66 km2, 54% del territorio).
Ituango está ubicado en la unidad fisiográfica de la Cordillera Occidental, caracterizada en la zona; por una topografía abrupta, producto de la intensa disección que ha dado lugar a profundos valles en forma de “V”, con pendientes de alto ángulo y generalmente largas.
El casco urbano se encuentra en un filo ancho y “redondeado” que contrasta fuertemente con el entorno; la zona urbana se caracteriza por presentar un trazado en damero (ortogonal), con un parque principal, alrededor del cual giran las actividades económicas, los equipamientos y gran parte de los servicios que genera el municipio. Morfológicamente esta constituido por 83 manzanas, muchas de las cuales están sin conformar, al igual que algunas de las vías (calles y carreras), que suman un total de 128 aproximadamente, la extensión del área del casco urbano se estima en 0,5 kilómetros cuadrados, distribuidos sobre un eje longitudinal de 1.500 metros y con un eje transversal promedio de 350 metros.
Hernán Darío Alvarez Uribe es su actual alcalde como integrante del Partido Liberal.
La página web del municipio se puede ubicar en el siguiente enlace electrónico
El día 10 de agosto del año en curso llego al municipio de Ituango la Comisión de verificación de la ONU encargada de visitar cada una de las zonas veredales y campamentos que servirán de ubicación política para las Farc,
En la página web del municipio no se registra el Plan de Desarrollo de la actual administración que se anuncia como Todos contamos para el cambio. Grave falla del actual gobierno local.
El plan Básico de Ordenamiento Territorial del municipio se puede encontrar en la siguiente dirección. Este plan es crucial para la construcción de las nuevas geografías de la paz que lidera las Farc en su transformación hacia la acción política de masas. Hay que consultar con esmero los mapas, las cartografías y las localizaciones de la población.
Es necesario consultar el Plan de la Hidroeléctrica de Ituango en la siguiente dirección electrónica
Ituango tiene todos los potenciales históricos, humanos, geográficos y democráticos para apalancar la paz en el Norte del departamento de Antioquia, en Córdoba y Bolívar. Se trata de un corredor geopolítico estratégico.
Hay que avanzar allí en la materialización de los acuerdos de paz agrarios, democráticos, de víctimas, de erradicación de cultivos ilíciticos y de organización y presencia de los movimientos sociales agrarios.
Imagen con la foto del jurista Jesús María Valle.
Nota. Potente el Paro cívico y la protesta popular de los nuevos movimientos sociales del departamento del Choco, sus 30 municipios y sus 500 mil habitantes. El Pliego de peticiones de los chocoanos exige salud, castigo a los políticos corruptos, escuelas, carretereas, vivienda, empelo decente y respeto por los derechos humanos.
Lamanetable el comportamiento de Rivera, el Ministro encargado del Interior, que recurre a viejas prácticas macartistas para estigmatizar y criminalizar la protesta social con el cuento de que son líderes de izquierda los que promueven la legitima acción colectiva. Vive en el mundo de la ultraderecha uribista.
Apoyamos resueltamente el paro civico del departamento del Chocó y nos sumamos a sus justas demandas. No más dilaciones, no más mentiras, no más corrupción de la vieja clase política santista y uribista.