El tiempo se le agotó al magistrado Jorge Pretelt y ya su suerte como magistrado quedo definitivamente en manos de la plenaria del Senado. Esta debe votar por mayoría simple el informe que preparó la comisión encargada de adelantar los trámites respectivos en el Congreso y cuya ponencia pide la suspensión inmediata del jurista. Esta tesis se impuso luego de que los tres congresistas uribistas (José Obdulio Gaviria, Alfredo Ramos y Paloma Valencia) que participan en la Comisión Instructora y aliados de Pretelt, fueron derrotados. Triunfó el grupo de cuatro legisladores (Juan Manuel Corzo, Guillermo Santos, Jorge Prieto y Roselvertt Rodríguez) que se oponen a la continuidad de Pretelt. El caso ya pasó por la Comisión de Acusación, y por la plenaria de la Cámara adonde se decidió –96 votos contra 45– que escalara a última instancia en la plenaria del Senado para que se vote si se le quita la toga al magistrado.
Jorge Pretelt se resiste perder su asiento en la Corte Constitucional. Hay que retroceder casi 60 años en los anales la historia nacional para hallar una situación similar a la que se enfrenta hoy el magistrado, quien está a un paso de ser declarado indigno por el Senado con lo que de inmediato perdería su cargo y el expediente en su contra por corrupción sería trasladado a la Corte Suprema de Justicia donde debería enfrentar un juicio penal y que, de ser hallado culpable, podría significarle cerca de 8 años de cárcel. El ex presidente Gustavo Rojas Pinilla ha sido el último alto dignatario en afrontar una situación así cuando el Congreso lo acusó en última instancia, también por corrupción, el 29 de septiembre de 1958, en un proceso en el que al final el dictador fue declarado inocente.
A Pretelt se le señala de que siendo presidente de la Corte Constitucional habría exigido 500 millones de pesos a la empresa Fidupetrol a cambio de que la corte resolviera una tutela favorable a la compañía, por el lío ya está condenado el abogado Víctor Pacheco, detractor de Pretelt, quien paga 2 años y medio de cárcel y tiene un acuerdo de colaboración con la Fiscalía.
Pretelt y su abogado Abelardo de la Espriella han tratado de muchas formas evitar que el juicio político en el Congreso avance. En vísperas de la decisiva votación el magistrado hizo llega una carta al parlamento en que solicita que el caso cuente con la veeduría de un observador de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Por su parte, De la Espriella recusó a 15 de los 102 congresistas que integran la plenaria del Senado señalando que están impedidos para votar hoy pues han prejuzgado al emitir alguna opinión sobre el asunto. Con el mismo argumento otros 47 legisladores fueron recusados por un ciudadano.
Para el abogado De la Espriella el trámite surtido en Capitolio es un “linchamiento” de los congresistas contra Pretelt. La Comisión de Ética del congreso deberá resolver el dilema de si en un juicio político pueden ser recusados los senadores por sus opiniones. Esta comisión deberá entregar un informe hoy y tras la exposición de este la plenaria entrará a decidir si prosperan las 62 recusaciones alegadas. La defensa de Pretelt y los congresistas afectos a este también han cuestionado que se vaya a votar en última instancia cuando apenas ayer (17 de agosto), se entregó copia del caso a los congresistas para su estudio, y que de inmediato el Presidente del Senado, Óscar Mauricio Lizcano, citó para votar hoy.
Cómo último recurso De la Espriella colgó en redes sociales un extenso discurso que tituló “Mensaje al Congreso de Colombia: historia de un montaje”. Son 36 minutos en los que el abogado lee una serie de argumentos a favor de su cliente y dice que lo hace de esa forma porque “se me cercenó la posibilidad de hacerlo personalmente ante el honorable Senado de la República en condición de abogado defensor del magistrado Jorge Ignacio Pretelt”.
Tres asuntos de trámite deberá resolver hoy la plenaria del Senado antes de entrar a la votación decisoria. El primero es definir si el debate que se dará antes de la votación será público o reservado, es decir, si a este podrá ingresar la prensa y ser transmitido a todo el país por la televisión oficial. Dado que el reglamento del Congreso dice que este tipo de votación debe ser “nominal y pública” resultaría contradictorio que el debate previo no lo sea. Sin embargo este asunto debe ser discutido y resuelto. El segundo asunto es si hay lugar a las 62 recusaciones que Pretelt y su abogado formularon. Y el tercero es confirmar oficialmente que de lo que se está ocupando el congreso es de un “antejuicio político” y que en caso de avanzar le corresponderá a la Corte Suprema juzgar si Pretelt es culpable penalmente de cometer algún delito en este caso. Resuelto esto la suerte del magistrado está echada y la plenaria del Senado entrará a votar.
Este es el mensaje de Abelardo de la Espriella al Congreso:
#CasoPretelt Mensaje al Congreso de Colombia del Dr Abelardo De La Espriella: #HistoriaDeUnMontaje vía https://t.co/rBUBiSbrHF
— DeLaEspriellaLawyers (@DELAESPRIELLAE) August 18, 2016