El negocio a gran escala del contrabando de gasolina entre en La Guajira y Venezuela produjo un gigantesco operativo de la DIAN y el Esmad contra el clan de Cielo Redondo en el municipio de Uribia, el más grande resguardo indígena de Colombia. La exalcaldesa Cielo Redondo está huyendo desde que el fiscal Eduardo Montealegre le emitió una orden de captura pero mantiene el control del municipio y de buena parte de La Guajira. Uno de sus hijos, Luis Enrique, es actual alcalde y el otro, Emi Solano, está al frente del negocio de contrabando de la mano del exsecretario de obras Harry Badillo. Ambos están detrás del manejo de dos gigantescas bombas de gasolina en Uribia y otra por inaugurar en la capital, Riohacha. El clan familiar ha sido acusado de auspiciar al grupo paramilitar frente contra insurgencia wayúu, que operó hasta 2012 tras la extradición de su comandante Arnulfo Sánchez, alias Pablo, por orden del presidente Juan Manuel Santos.
