Nuestro hijo de 13 años, es el mejor ejemplo de fortaleza para quienes lo conocen. A sus 8 años fue diagnosticado con Leucemia Linfoblástica Aguda y desde ese día su vida y la de su familia se convirtió en una lucha constante para vencer la enfermedad y salir adelante. Por eso, muchos le dicen "Hero", ya que ha tenido la fortaleza y la entereza de vivir todos los días como si la enfermedad no existiera. Y con la mejor disposición, serenidad y ternura ha sobrellevado los difíciles obstáculos que lleva consigo la leucemia, acostumbrándose a vivir aislado de las personas que quiere, de su colegio y de las cosas que más le gustan.
Hoy, luego de 4 años de quimioterapia y un trasplante de médula fallido, desafortunadamente la leucemia regresó. Ya no hay opciones médicas en Colombia, pero Jero quiere seguir luchando. Su única esperanza ahora es vincularse a un tratamiento experimental de Celulas T (Cancer researchers claim 'extraordinary results' using T-cell therapy) en Estados Unidos que ha mostrado resultados extraordinarios en niños en etapa terminal.
Así, además de curarse, Jero pondrá su granito de arena para ayudar a las próximas generaciones de niños con leucemia.