Cuántas cosas se pueden aprender del momento inédito que vive hoy la política española. Ver en vivo y en directo la innovación comunicativa que ha implicado el surgimiento de dos partidos políticos nuevos; ver los dos partidos tradicionales jugando sus restos para no perder vigencia ni poder y ver como todo esto se configura en un rompecabezas de poder o mejor, un auténtico juego de tronos.
El sistema electoral de España es parlamentario, obliga al partido que quiera ser gobierno nacional a ser mayoría en el Congreso y si no lo es a hacer las alianzas para lograrlo, de lo contrario no podrá posesionar el presidente y ser gobierno. Durante las últimas décadas el poder, es decir las mayorías parlamentarias, se lo han turnado entre el Partido Popular (PP) y el Partido Socialista (PSOE). En este lapso Izquierda Unida ha sido el tercer partido, importante pero minoritario.
Para gobernar un partido en España debe obtener más de 176 escaños en el Congreso y tras las pasadas elecciones ninguno la obtuvo y la situación es tan inédita que casi ninguna combinación de alianzas la obtiene. Algunos vaticinan desde ya que las elecciones se tendrán que repetir. Esta es la nueva realidad política de España:
Aunque los partidos tradicionales fueron los más votados, son en realidad los grandes derrotados. En comparación con las pasadas elecciones el Partido Popular perdió 3,8 millones de votos y 60 escaños, mientras que el PSOE perdió 1,5 millones de votos y 20 escaños. Por el lado de los nuevos partidos el sistema electoral español (Ley D'Hondt) afectó a Podemos ya que con 5.100.000 votos logró 69 escaños mientras que el PSOE con 5.511.000 obtuvo 90; ahora, si Podemos hubiese ido a las elecciones con conjunto con Izquierda Unida habrían logrado 13 escaños más según el periódico Publico.es
Izquierda Unida, el partido de mis afectos, fue la formación más afectada por la ley electoral. Logró casi un millón de votos y sólo dos diputados los cuales serán los diputados con mayor representatividad del Congreso. La Izquierda busca revitalizarse y hay pugnas internas entre sus líderes por lo que pienso que en los próximos meses se debatirá entre los riesgos de la renovación para crecer y la tranquilidad de mantener sus tradiciones preservando su electorado.
Luego de esta introducción ¿como quedan las cosas para hacer gobierno y elegir presidente? (recuerden que para ser mayoría deben lograr 176 escaños).
Así las cosas, el Partido Popular, a pesar tener más votos, representa para la mayoría de los españoles la corrupción y el continuismo. Personalmente pienso que ha quedado a la vera del camino en este Gobierno.
El PSOE tiene la oportunidad hacer gobierno, de hecho Pedro Sánchez está intentando ahora hacer las mayorías pero al incluir a ciudadanos no puede contar con Podemos quienes los vetaron. Los socialistas trabajan en no dejar se ser la alternativa al PP por ello temen hacer un acuerdo con Podemos su contendor de patio, recordemos que los de Pablo Iglesias crecieron con votos de todos los sectores incluso de la gente que no votaba, pero con muchos del PSOE.
La situación de Podemos es privilegiada, PSOE los necesita, sin ellos las cuentas no cuadran y Podemos ha advertido que no va con ciudadanos en un mismo Gobierno y por el contrario ofrece a los socialistas alianzas con partidos nacionalistas proponiendo a ellos un estado plurinacional. Por otro lado si PSOE deja a un lado a Podemos y se alinea con Ciudadanos y el Partido Popular dejará en manos de los de Iglesias hacer oposición, algo que hacen mejor que nadie. Hay que recordar que la situación económica de España es delicada y podrá emporar lo que sería una tormenta perfecta para el PSOE en el Gobierno con Podemos en la oposición.
Ciudadanos se ha desdibujado al lograr muchos menos votos de los que se vaticinaban. Su principal contendor es el PP y en unas hipotéticas elecciones no creo que le quiten más votos a los populares, en mi concepto el fenómeno ciudadanos es interesante pero no vaticino que crezca más por ahora.
Pensando en una repetición de las elecciones, y con la llegada de los nuevos partidos, Izquierda Unida debe optar por una alianza con Podemos y lograr al menos 10 diputados más, lo cual pondría a esta alianza con Podemos muy cerca del PP y superando al PSOE al tiempo que se revitaliza a los unitarios. Pero Podemos debe garantizar a Izquierda Unida ser un coequipero tratado con dignidad y emprender un proyecto donde las dos formaciones crezcan juntas. Izquierda Unida es un partido serio, su coherencia le ha costado jugar un papel secundario por décadas y Podemos debe trabajar en equipo con ellos reconociendo su estatura moral.
En mi opinión la formula adecuada es sumar al PSOE, Podemos, Izquierda Unida más los partidos nacionalistas. Formar un gobierno progresista de izquierda que margine al PP el partido de la corrupción y a Ciudadanos su bastón. Este Gobierno trabajar por un gobierno plurinacional que le de mayor participación a las autonomías de modo que socialmente sea para ellas mejor seguir en España.
Si se llegan a repetir elecciones, pienso que si Izquierda Unida y Podemos van juntos superarán al PSOE y tendrían opciones de derrotar al PP, mientras que los socialistas y Ciudadanos perderán votos.
@AndresEliasGil
