Los resultados electorales de pasado domingo se podrían resumir en dos grandes ítems. Por un lado, las mafias ganaron, de los 152 candidatos que fueron denunciados por la Fundación Paz y Reconciliación por alianzas con sectores de la ilegalidad, cerca del 60 % logró ganar, incluso personas que habían sido capturadas días antes de las elecciones como Jhon Jairo Torres que aspiraba a la alcaldía de Yopal ganó desde la cárcel. Casi sucede lo mismo con Jorge Coral Rivas, candidato por el Partido Conservador a la gobernación del Putumayo, quien fue capturado por relaciones con una banda criminal llamada La cosntruc, quedó segundo en las votaciones. Se podría decir que en varias regiones del país, la ciudadanía eligió bandidos para que los gobernara.
En segundo lugar, tal vez el gran ganador de las elecciones es Germán Vargas Lleras, quien se queda con cinco gobernaciones y ocho alcaldías capitales. Entre las gobernaciones, está la de La Guajira con la cuestionada heredera de Kiko Gómez y amiga de narcotraficantes como Gervasio Vandeblásquez, Oneida Pinto. También logró Magdalena, como la cuestionada gobernadora electa Rosa Cotes esposa del parapolítico Francisco Chico Zúñiga y apoyada por una serie de parapolíticos de la región. También logra Sucre, con Edgar Martínez, allí se aliaron todos contra el Yahir Acuña y además logró la gobernación de Vaupés y Amazonas.
La otra fuerza ganadora fue el Partido Liberal, quien con la conquista de Santander con el cuestionado Didier Tavera, a quien se le acusa de ser cercanos a grupos paramilitares y se le sindica a la familia de ser cercana al narcotráfico. También los liberales logran la gobernación de Antioquia, con el cuestionado Luis Pérez Gutiérrez y logró Atlántico con Verano de la Rosa, y con Pacheco la Gobernación del Caquetá. Además de varias decenas de concejales y asambleístas. Todo parece indicar que el Liberalismo de la mano de Cesar Gaviria pondrá un fuerte competidor a Germán Vargas Lleras que seguramente será Humberto de la Calle.
Otro de los ganadores es el Partido Verde, quienes logran la gobernación de Boyacá de la mano de Carlos Amaya, Igualmente ganaron la gobernación de Nariño y Putumayo, la primera con Camilo Romero y la segunda con la joven mujer Sorrel Aroca. Lograron igualmente la alcaldía de Neiva de la mano de Rodrigo Lara. Así que los verdes logran cierta fortaleza para las elecciones del año 2018, muy seguramente su candidato presidencial saldrá de una consulta entre Antonio Navarro y Claudia López.
Al partido de la U no le fue bien, pero tampoco mal y seguramente jugarán con Humberto de La Calle en las presidenciales. Ganaron de lejos la Gobernación del Valle con la cuestionada baronesa política Dilian Francisca Toro y ganaron el Cesar con el cuestionado Franco Ovalle, quien es el peón de la familia Gnecco en dicho departamento.
El resto del mapa para el 2018 lo componen una serie de perdedores, el primero es Sergio Fajardo quien pierde estrepitosamente la gobernación de Antioquia con Federico Restrepo, aunque logra conservar cierta influencia con la alcaldía de Medellín. En todo caso Fajardo no sale bien librado de estas elecciones. Y la pregunta es si para el 2018 se irá solo a inmolarse con un séquito de amigos que le hablan al oído o entrará a jugar en el Partido Verde o preferiría una alianza con el uribismo.
Otro de los perdedores son los conservadores, quienes pierden la gobernación de Putumayo que la tenían casi segura con Jorge Coral Rivas. Coral Rivas fue capturado días antes de las elecciones luego de que apareciera en videos con un jefe de bacrim. También pierden la gobernación del Caquetá con el cuestionado político Arnulfo Gasca.
El otro perdedor es la izquierda y aquí se cuenta a los precandidatos Jorge Robledo y Gustavo Petro. Pierden Bogotá, la joya de la corona y no logran ninguna alcaldía importante más allá de la de Ibagué, y una serie de concejales en municipios pequeños.
El otro gran perdedor es el uribismo, quien perdió las casi seguras alcaldías de Medellín y Manizales. En Medellín el perdedor fue Juan Carlos Vélez, quien hasta dos días antes de elecciones era el seguro ganador. En Manizales las cosas fueron peores para el uribismo, Adriana Gutiérrez quedó tercera en las votaciones. Las preguntas para Uribe son si para el 2018 irá con un candidato por el Centro Democrático o realizará alianzas ya sea con Vargas Lleras o con Fajardo. Ideológicamente está más cercano del primero, pero las disputas internas son grandes. Con Fajardo también se sentiría cómodo, de hecho es una alianza que el Sindicato Antioqueño o el Grupo Empresarial Antioqueño sueña con hacer.
Así que nada nuevo.