Si usted aspira a la Gobernación de Santander, el máximo para financiar su campaña debería estar en los 3.432 millones de pesos, eso, según el Consejo Nacional Electoral (CNE). El largo desfile de camionetas, vans y buses que están acompañando las avanzadas de algunos candidatos a la Gobernación de Santander ponen en evidencia que tan solo este valor alcanzaría para cubrir la compra, alquiler y sostenimiento del cuantioso parque automotor.
Si los 3.432 millones fijados por el CNE, frente a lo que en verdad se gasta, se vuelven una “pichurria” en palabras de una de las fuentes entrevistadas, quien es cercano a una de las campañas más fuertes en Santander, ¿cuánto es en realidad, lo que se está gastando?
Estimaciones de los expertos, aseguran que la cifra puede ir desde los 50 mil a 100 mil millones (de ahí para arriba) las que más están gastando, hasta los 10 mil millones, la que podríamos llamar la más austera. No existen datos reales y confiables, como tampoco controles efectivos a la financiación. La mayor obligación a cargo de los candidatos se limita a que dos meses después de elecciones, sean ellos mismos quienes entreguen reportes de los gastos totales al portal “Cuentas claras” del CNE.
Como indagar por la real cifra invertida puede llegar a ser la verdad nunca jamás revelada, solo resta sacar nuestras propias cuentas. Pero aquí las operaciones no van en resta, se necesita multiplicar y sumar. Por cada candidato, aparte del valor de los ostentosos carros, tenga en cuenta los gastos de las cuñas, haga la multiplicación por número de valla. Hay candidatos que les da para cubrir lo largo y ancho de los 87 municipios del departamento, pasacalles, volantes, afiches, eventos, un favor allí, otro favor allá, contabilice los miles de ponchos regalados en ferias, el pago de asesores y demás séquito de muchachos que nos encontramos en las calles.
En palabras atribuibles a Carlos Gaviria, quien invierte tanto dinero en una campaña, no está haciendo política, está haciendo un negocio. Entre las atracciones que llamarían a estos inversionistas electorales a quedarse con la Gobernación Santander, estaría la ejecución del jugoso Contrato Plan Santander, uno de los contratos suscritos entre la Gobernación y la Nación, cuyo monto de financiación es uno de los más grandes del país, cercano a los 7,8 billones de pesos.
Las predicciones, que en política, son llamadas encuestas electorales, (si esta también es paga, no olvide sumarla), apuntan que la Gobernación, no quedará en manos del que tenga mejores propuestas ¿cuáles propuestas? Si nada extraordinario ocurre, los destinos del departamento, estarán asegurados entre los candidatos que compraron mejores carros, mayor número de vallas y otras compras necesarias. Es de esperar, entonces, que al ser elegidos estos sean, quienes busquen recuperar la inversión de su negocio.