El grupo significativo de ciudadanos Progresistas, gobierno en la ciudad de Bogotá en cabeza del alcalde Gustavo Petro vio un indicador negativo en la última encuesta de “Cifras y Conceptos” cuando se les preguntó a los encuestados por su intención de voto a las listas al Congreso le la República. Sorpresivo para algunos, si tenemos en cuenta que lograron la alcaldía capitalina con más de 700.000 votos, sin contar con ninguna alianza interpartidista, y obtenido la segunda votación mayoritaria al Concejo, con un estrecho margen con la primera lista a esta corporación, sumado a esto, la votación que obtuvo su principal líder fuera de Bogotá durante las elecciones presidenciales la cual fue superior a 1.100.000 votos ocupando el segundo lugar en la inmensa mayoría de departamentos de la costa y en el Putumayo, haría suponer que no les sería difícil superar el umbral mínimo del 3% conquistando así la tan anhelada personería jurídica. Ahora bien, que tiene desmotivado a algunos ciudadanos con relación al movimiento progresistas, algunas razones las esbozaré a continuación:
Incertidumbre: Comparto la frase que Petro lanzó en una entrevista donde manifestaba: “le dices a un alcalde de izquierda que está entre la destitución y la revocatoria, ¿será que podemos hablar de un país democrático?” el ciudadano del común, alejado un poco de los avatares del poder, puede apesadumbrarse al ver en un titular noticioso la posibilidad de quedarse sin alcalde antes del periodo establecido, produciendo en el inconsciente colectivo, así sea que individualmente no se admita, una sensación de incertidumbre ante lo venidero, lo que puede redundar en una consecuencia para el proyecto político que representa el dirigente, por muy externas que hayan sido las causantes de esta situación.
Ataque Mediático: la subjetividad con que la mayoría de medios masivos abordan la noticia con relación a la alcaldía de Bogotá dejan mucho que desear tanto desde el ejercicio de la profesión del periodista, como desde la moral misma. Ejemplos ahí mucho, entre otros recuerdo que las cosas que le criticaban a Petro durante los 3 primeros meses de administración, las escuche decir 15 días después de haber ganado las elecciones sin siquiera haberse posesionado, masifican los errores como casi nunca lo vi hacer durante toda mi vida adulta pendiente de la política. Las decenas de artículos que aparecen a diario, atacándolo desde muchos puntos de vista y estilos no tiene precedente, y mucho menos las conclusiones negativas varias sacadas de hipérboles. Este ejercicio pseudo periodístico crea una matriz de opinión negativa al blanco, la cual no necesariamente tiene que ser real en sus afirmaciones.
Minimización de los resultados: Acompañado de estas matriz de opinión, nos encontramos con la minimización e invisibilización de lo positivo. Un gran ejemplo es que el día que la alcaldía modificó la flota de camiones de basura, después de la crisis de los camiones viejos, no apareció un solo periodista a cubrir el evento de presentación de la flota de limpieza. Pocos han sido los aciertos de la prensa para cubrir los logros de la administración, tan vez si se hizo en parte con el tema de la resocialización de habitantes de la “L” y rehabilitación de farmacodependencia, no sin fuertes críticas a la sugerencia de la secretaria de salud, tal vez con las redadas al microtráfico en la misma zona y sin embargo algunos reflexionaron que esto ocurrió por la aparición mediática del Presidente de la República en un afán de inflar su desgastada imagen.
Poca representatividad en las regiones: en las regiones no se encuentran las figuras que si hay en la capital por parte del movimiento progresista, en las regiones encontramos personas poco carismáticas (algo muy extraño en proyectos políticos alternativos), con poca capacidad de convocatoria, alguno de ellos sin patrimonios electorales y sin haber superado la reunionitis a puertas cerradas y el sectarismo. La historia de la persecución política a los militantes de la izquierda democrática y exterminio militar y paramilitar en la década de los 80´s por supuesto fue algo que debilito el nacimiento de nuevos cuadros políticos que aportaran positivamente al país, y es una historia que nunca se debe dejar de contar, sin embargo eso no es excusa para lo poco estructurado que está este movimiento en las regiones. Seguidamente así como ocurre con el Partido Verde, está la percepción que el progresismo es un partido únicamente de presencia en Bogotá, por muchos seguidores que tenga por fuera de la capital.
Fuga De Votos: Mucho de los votos que Petro obtuvo en las presidenciales fuera de Bogotá, fueron con el apoyo de los que todavía permanecen en el Polo Democrático Alternativo, lo que comienza a clarificar lo bien parado que quedó en la encuesta, y otra parte de los que migraron a Marcha Patriótica.
Cero campañas: contrario a la derecha del Puro Centro Democrático la cual lleva más de un año haciendo campaña a su movimiento y a sus figuras más representativas y han tanteado ante la opinión pública parte de lo que sería la lista al Senado, Progresistas no lleva un solo día de campaña en este sentido, entre ellos tratan de armar una lista pluralista e incluyente, sin la más mínima intención de general expectativa positiva al público, explicación más que suficiente de por que tienen el 1% en intención de voto.
Muestra De La Encuesta: temí colocar este punto en el análisis, so pena de ser juzgado de querer descalificar la encuesta, pero verán que no es así. Contrario a lo que muchos piensan los proyectos alternativos suelen ser votados por electores cualificados académicamente y de estratos sociales medios, medios altos y altos, vemos en esta encuesta que el 69% de la muestra no supera los estudios de secundaria, lo que confirma lo poco atractivo que es para este tipo de público los proyectos políticos con propuestas programáticas cimentadas en la intelectualidad.
Conclusiones: Progresista debe aprender de otro tipo de proyectos políticos existentes en el país y recordar que la campaña de difusión de las ideas no es una cosa coyuntural y de unas elecciones, es un proceso permanente, sobre todo en grupos con muchos ideales y poco presupuesto. La prontitud en que estructuren la lista será factor fundamental para revertir la tendencia negativa en el sondeo. Por el bien de la democracia y la presencia de diversidad de colores políticos en el próximo congreso, esperemos que este sondeo sea solo el reflejo de un momento muy previo a las elecciones y todos los partidos y movimientos tengan representatividad parlamentaria en la próxima legislatura.