En su primera final el Manchester City se enfrentará a un rival nacional, el Chelsea, que llega a la final por tercera vez y busca un nuevo título tras el logrado en 2012.
Llegar hasta la final no es fácil, y les promete una jugosa recompensa económica que se reparte así: el participante que haga parte de la fase de grupos recibe en total 15.2 millones de euros, previo a iniciar la competición. Además, cada victoria en esa fase les da 2.7 millones de euros y los empates 900.000 euros. Los clubes que logran pasar a los octavos de final reciben cada uno 9.5 millones de euros, 10.5 por los cuartos de final, 12 por llegar hasta las semifinales, 15 para los finalistas y 19 para el campeón.
El Manchester City es invicto en el Estadio do Dragao, en Oporto, donde han tenido once victorias, un empate y sólo han recibido cuatro goles, mientras que el Chelsey lo hace con una derrota ante el Oporto en la vuelta de cuartos, y con ocho victorias, tres empates y la misma cifra de goles recibidos que su rival.
Esta es la tercera final de la UEFA Champions League en la que participan sólo equipos ingleses. En la primera final del Chelsea perdió en los penaltis contra el Manchester United en Moscú en 2008, y hace dos años el Liverpool venció al Tottenham en Madrid.
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