“En Buen Comienzo se preocupan por el bienestar integral del niño. Te informan cómo está evolucionado, si está comiendo, si tiene algún inconveniente. Es un acompañamiento y seguimiento muy completo”, expresan con gratitud, Blanca y su esposo Jair. Esta pareja, que reside en el barrio La Francia, en la comuna 2, Santa Cruz, son los padres de Bryan y Juan José, dos chicos de los miles que han sido beneficiados por este programa de la Alcaldía de Medellín.
El hijo mayor es Bryan, quien egresó del programa hace unos siete años y hoy cursa sexto grado con excelentes resultados académicos en una institución educativa pública. Juan José tiene cinco años y asiste al Centro Infantil Popular Número 2, donde gracias a Buen Comienzo ha alcanzado una evolución significativa en su desarrollo cognitivo.
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“Cuando estaba embarazada de Juan José me diagnosticaron cáncer. Fue un reto muy duro que gracias a Dios puede superar. Mientras afrontaba ese difícil proceso, el niño mayor estuvo muy acompañado por mis hermanas en sus tres primeros años y no ingresó a ningún jardín infantil. Por ello, hasta los cuatro años él casi no hablaba y se comunicaba en gran medida por gestos, pero actualmente ha ido mejorando su lenguaje a partir de la formación recibida en Buen Comienzo y la interacción con otros niños”, explica Blanca.
“Buen Comienzo cuenta con dos modalidades de atención: la familiar y la institucional. En la primera, acompañamos a las madres gestantes y lactantes a través de encuentros grupales y visitas en el hogar, en donde buscamos que las familias se empoderen del proceso de gestación y de alimentar a sus hijos con leche materna. Los encuentros se llevan a cabo tres veces al mes y las visitas a las casas son trimestrales”, explica Camila Gaviria Barreneche, directora del programa.
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La funcionaria agrega que la modalidad institucional está enfocada a la atención integral de la primera infancia por medio de los centros infantiles y jardines del programa. “En estos espacios lo que hacemos es acompañar a los niños durante ocho horas, a través de diferentes componentes: pedagogía, seguimiento al desarrollo, educación en salud y gestión del riesgo, protección, participación y movilización”, precisa.
Actualmente, Buen Comienzo cuenta con más de 240 sedes en las comunas y corregimientos de la ciudad. De ellas, 21 son jardines infantiles, número que se incrementará antes de finalizar 2019 con la apertura de tres nuevos espacios: Casa del Encuentro, ubicado al interior del Museo de Antioquia; La Colina (en Guayabal); y Altos de San Juan, en la comuna de San Javier.
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Otro de los avances alcanzados por el programa en los últimos cuatro años es el aumento en el número de días de atención, pasando de 199 a 219. “Cuando asumimos esta Administración encontramos que los niños pasaban mucho tiempo fuera del sistema y eso hacía que sus procesos pedagógicos y de nutrición disminuyeran. En la evaluación de resultados que realizamos el año pasado encontramos que a mayor permanencia de los chicos en el programa, mayor es su desarrollo cognitivo”, explica la directora de Buen Comienzo sobre la importancia del incremento en el tiempo de atención.
Un festival creativo para el bienestar integral
Entre las líneas de trabajo del programa se encuentra también el Festival Buen Comienzo, estrategia de movilización social y un gran evento de ciudad dirigido a los niños y sus familias.
La décima primera versión del festival, llevada a cabo en Plaza Mayor en septiembre de este año, registró más de 110.000 visitantes que disfrutaron de 39 salas interactivas y 29 experiencias de juego. Estos espacios buscaban potenciar habilidades y destrezas como la creatividad, el trabajo en equipo, la conciencia ambiental, la imaginación y la innovación.
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