La semana pasada, un grupo variopinto de personas que nos movemos en los entornos digitales y que además tenemos alma de activistas, nos encontramos en Villavicencio para celebrar el Tercer Encuentro de Comunidades Digitales #CD2014, una iniciativa impulsada por la Brigada Digital y financiada en su mayoría por el MinisterioTIC.
La Brigada Digital toma su nombre de una serie de acciones ciudadanas, voluntarias, que se establecieron en la red en el 2010, como respuesta de hackers y activistas digitales a la denominada "Primer Ola Invernal". En esa época, le apostaron a usar sus destrezas en redes sociales y programación para crear un grupo de reacción y solidaridad que ayudara a los damnificados. Al muy poco tiempo, Presidencia, MinTIC y la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres patrocinaron la idea y formalmente lanzaron la campaña #BrigadaDigital, para recolectar donaciones en dinero con la colaboración de las empresas de telecomunicaciones y los brigadistas digitales. Finalmente la idea de Brigada Digital fue recogida por MinTIC y ahora hace parte de sus programas. Si bien se comporta como una comunidad de voluntarios, algunos de sus miembros trabajan para programas del Ministerio y otros mantienen iniciativas autónomas.
Durante esta tercera versión del encuentro, una de las comunidades que causó mayor interés fue la de personas ciegas, encabezada por Norbey Salazar. En su presentación, Norbey mostró algunos de los problemas relacionados con la accesibilidad y cómo se han subsanado con el uso de tecnologías, con la creación de listas de correo y su utilización por parte de las personas ciegas para encontrarse y compartir, no solo noticias, sino manuales, métodos y procedimientos para utilizar dispositivos. También mostró lo que ha significado, en el último año, la implementación del programa ConverTic y la posibilidad de acceder al software lector de pantalla y al magnificador gracias a la licencia país. Al día siguiente, en la presentación de la viceministra María Carolina Hoyos, se mostraron las cifras de impacto del programa ConverTic y las metas para descargas del software lector de pantalla.
Este programa de MinTIC, es posible gracias a la Ley 1680 de 2013, que dentro de sus artículos tiene dos puntos importantes: la adquisición de la licencia país para el software lector de pantalla y una excepción a la ley de derechos de autor que permite la transformación de obras a formatos accesibles sin permiso del autor, siempre y cuando la obra no se encuentre ya en un formato accesible. Además, exige a las entidades del Estado que sus páginas web sean accesibles.
La ley cumple con una deuda histórica: garantizar a las personas ciegas derechos fundamentales. En su momento, todos se felicitaron, no se escucharon voces de disenso, salvo la de la industria editorial para tratar de introducir la figura del tercero de confianza (una suerte de institución que debería decidir por las personas ciegas cuáles contenidos transformar y cuáles no), pero que en la conciliación de la ley fue descartada. Luego de la sanción presidencial, MinTIC pasó a implementar el programa. A un año de su puesta en marcha las cifras son realmente muy buenas: más de 100.000 descargas del software, miles de personas ciegas que ahora pueden acceder a contenidos a lo largo y ancho del país, colegios que tienen esta tecnología y logran ofrecer programas de inclusión. Todo muy bonito, salvo que la Ley tiene en este momento tres demandas en la Corte Constitucional.
Una se pregunta, ¿quién puede demandar esta ley? ¿Quién puede estar en contra del acceso a la información y al conocimiento de una población históricamente vulnerada?, y la respuesta sorprende... la última demanda fue presentada por Juan Carlos Monroy, el exdirector nacional de derechos de autor, que según comentan trabaja para la Cámara Colombiana del Libro.
El periodo para presentar intervenciones ante la Corte Constitucional sobre esta última demanda vence en una semana, el 19 de diciembre a las 5 p.m., por eso le propongo a la Brigada Digital que movilice sus filas y ayude a proteger esta ley. Es fácil, solo deben presentar intervenciones ciudadanas ante la Corte. No hay ninguna formalidad en el texto de intervención, más allá de nombrar el número de radicado de la demanda (D- 10481) y la magistrada asignada a llevar el proceso (Gloria Stella Ortíz Delgado). Cualquier persona, sin necesidad de ser abogado, puede participar dando a conocer a la Corte sus argumentos sobre la demanda.
Eso sí, no hay forma de acceder a las demandas en línea (esta sería otra propuesta para la Brigada Digital, quizás para el próximo año). Por eso, si uno quiere solicitar un documento relacionado con estos procesos debe ir hasta la Corte personalmente. Pero a los interesados les ahorro la fatiga: ésta es la última demanda. No les puedo ahorrar el viaje para radicar sus respuestas, aunque las pueden enviar por correo certificado (Bogotá, Calle 12 No. 7 - 65. Palacio de Justicia).
En resumen, le pido a la Brigada Digital y a todo aquel que quiera, que nos ayude escribiendo una intervención donde pida que se mantenga la garantía del acceso a la información, al conocimiento y a las TIC para las personas ciegas. Demos todo el apoyo que podamos a esta ley. Hagamos valer el lema de la Brigada: “pasemos del me gusta al me comprometo”.
RedPaTodos es un colectivo de organizaciones e individuos de la sociedad civil que promueve un uso incluyente de Internet y aboga por el respeto a los derechos fundamentales y las libertades civiles de todos los colombianos en el entorno digital.
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